El documental Huicholes: los últimos guardianes del peyote del director Hernán Vilchez, describe la cultura de la etnia huichol, sus costumbres y cosmovisión milenaria. A la par de toda su riqueza cultural también podemos ver su problemática actual: los huicholes tienen la amenaza latente de la destrucción de sus tierras sagradas a mano de la industria minera extranjera.



La importancia de que este documental llegue a manos de la mayor cantidad de mexicanos radica en crear un poco de conciencia sobre temas que el gobierno deja al olvido como es el caso de las etnias indígenas de nuestro país. Quizá algunas personas puedan llegar a pensar que no les compete prestar atención a dicha problemática por no ser parte de esa etnia pero realmente es porque no se hace un análisis profundo sobre esta problemática en particular como por ejemplo, darnos cuenta que las etnias indígenas son parte de nuestra riqueza cultural y también dichos territorios que están siendo explotados son parte de nuestro territorio y riqueza nacional.

Los huicholes pelean por una causa justa: mantener su territorio sagrado resguardado de la explotación minera. Desgraciadamente a las etnias indígenas se les ha dejado de lado y gracias a ello han sido despojados de sus tierras y de su cultura gradualmente.

¿Por qué es vital mantener Wirikuta a salvo?

Wirikuta es la tierra sagrada de los huicholes, donde ellos realizan su peregrinación para pedir a los dioses salud, lluvia y prosperidad para la tierra, es donde hay equilibrio total en la tierra y donde nace su vinculo sagrado con los dioses: el peyote. Básicamente toda su vida y cultura gira alrededor de este lugar sagrado y destruirlo llevaría a la destrucción inminente de esta cultura y también a un ecocidio enorme. Wirikuta es de los lugares más completos del planeta hablando de flora y fauna del desierto, su antigüedad data desde mucho antes de la cultura olmeca y por ello es invaluable su riqueza.

A los pobladores que circundan la zona se les han ofrecido trabajo seguro en las minas hasta por quince años y por esta causa hay personas que están a favor de la construcción de la mina. Les han hecho creer que no se tocará el agua de sus mantos acuíferos y que la extracción se hará sin destruir la tierra ya que plantean hacer la extracción bajo tierra. Investigadores, científicos y gente experta en el área demuestran que pasará lo contrario, realmente después de que ocurriera dicha explotación ya no habría trabajo y la tierra quedaría destruida y el agua contaminada. Nadie podría vivir o sobrevivir en la región.

Además que todas las ganancias monetarias que proveería la explotación de la mina serían para empresas privadas extranjeras. Jamás ninguno de nosotros los mexicanos seríamos beneficiados de ninguna forma por la explotación minera de Wirikuta. Antes no lo hemos sido y mucho menos ahora. No hay forma lógica de demostrar los beneficios de la explotación minera.

Por lo tanto se han ido desarrollando iniciativas para crear fuentes de empleo y también para poder realizar huertos para el autoconsumo de las familias que viven en esa zona, esto en base al concierto que se hizo para la obtención de fondos a favor de la preservación de Wirikuta.

Realmente como sociedad podemos encontrar el camino para crear empleos para las personas que viven en esa zona sin necesidad de destruir su cultura, la tierra y regalar lo nuestro a grandes corporaciones extranjeras. Eso es en lo que se está trabajando, en encontrar otras alternativas para que los habitantes de la zona puedan tener un trabajo sin perder sus tierras.

En el siguiente enlace encuentras la ficha técnica, sinopsis y más del documental Huicholes: Los últimos guardianes del peyote.

[] No te quedes sin la oportunidad de ver este documental en el Cine Morelos, que difícilmente se podrá volver a presentar y que este viernes 22 de agosto, tiene su ultima función.